JUAN DIEGO GONZÁLEZ
La biblioteca “Elena Poniatowska” fue inaugurada el pasado 11 de noviembre por la propia multilaureada periodista y escritora, quien vino a Todos Santos a celebrar como ella misma lo afirmó en el acto previo al corte de listón: “Una obra de amor bajo un cielo espectacularmente azul”. La historia inicia el 2003, cuando un grupo de residentes americanos en esta esquina de México, decidió apoyar a tres jovencitas que necesitaban una beca para terminar sus estudios de secundaria. El trabajo filantrópico y comunitario se vuelve adictivo. Luego siguieron cursos gratuitos de inglés, a los que se sumaron talleres de pintura. La recaudación de fondos hizo necesario el establecimiento de una sociedad civil y nació entonces The Palapa Society of Todos Santos A.C. Los cursos de inglés se convirtieron en un el programa Puente (Bridge to English), los talleres de pintura en el Programa de Arte Infantil y las becas en el Programa de Becas que apoya a estudiantes de preparatoria y universidad. El grupo conocido en el pueblo como “La Palapa” creció también en número de voluntarios y agremiados. Para el 2009 inicia la Biblioteca infantil. Con el paso de los años, se vuelve una biblioteca también para adultos, con un sistema de préstamos, tanto de libros como de películas. La necesidad de recaudar fondos para cubrir todos los programas hace que los integrantes de “La Palapa” toquen puertas y hagan diversos eventos para lograrlo, Están por ejemplo el Tianguis que se hace de forma anual, así como la 5K (carrera pedestre de cinco kilómetros). El 2012, patrocinados por el guitarrista de R.E.M Peter Buck, inicia el Music Festival, con la idea de presentar un espectáculo musical de gran resonancia, en el cual ha participado por ejemplo John Paul Jones, bajista de la banda Led Zeppelin. El sueño también crece. ¿Una escuela, una biblioteca más grande, se puede?
El 2015 el matrimonio de David y Cindy Higgins, originarios de Denver, Colorado pero residentes de Todos Santos hacen un ofrecimiento a “La Palapa”. El 2016 se inicia la construcción del Centro Educativo de La Palapa que consta de un campus con un edificio para secundaria, un edificio para el Programa Puente y otro edificio para albergar una biblioteca, la más grande de tipo bilingüe (español/ inglés) en Baja California Sur con más de 13 mil libros y más de 3 mil películas. ¿Y Elena Poniatowska? Uno de los programas más importantes de “La Palapa” es el de lectura y resultó natural que la nueva biblioteca llevará el nombre de un escritor o escritora. Gracias a las gestiones de Irma Arana (presidenta de Apalba en Ciudad Obregón) se estableció el contacto con la escritora. Quien esto escribe, en octubre de 2016 le hace la propuesta a Elena Poniatowska de que la biblioteca lleve su nombre. Cuando la escritora acepta, después se le invita a inaugurarla personalmente. Con una generosidad a toda prueba, acepta también esto. Los días 9, 10 y 11 de noviembre, Todos Santos estuvo de fiesta con la visita de la ganadora del Premio Cervantes 2013. Entre las actividades se destacan el Conversatorio sostenido en el Teatro “Gral. Márquez de León”, en el cual participaron también el poeta sudcaliforniano Chistopher Amador, Irma Arana y un servidor. Aquí la escritora resaltó la importancia de la educación: “Es fundamental en la vida de cualquier país, que lo primero que se debe respetar, es la educación de los niños, de los jóvenes, la formación de un país se hace a partir de la educación, si yo fuera presidente de la república, le pondría a la educación mucha atención… La política que más falta, es la política para los demás, la política del amor al prójimo, no como una cosa de iglesia o religiosa, se necesitan funcionarios que estén a la altura de lo que necesita la gente”. Sobre los libros y los maestros enfatizó: “un libro es un gran amigo, uno llega en la noche cansado y al lado de la cama está un libro, que a lo mejor empezaste a leer y al principio te dio muchísima flojera, al seguirlo leyendo lo haces con más gusto… Un maestro desde que tiene un niño (en clase), ejerce un gran impacto en él, sobre todo si es un buen maestro. Hay mucho mexicanos y mexicanas que tienen vocación de maestro y saben ser maestros…Yo creo que no hay nada más bonito que enseñar a alguien a leer y a escribir. Yo creo en enseñar a partir del sistema educativo como el Montessori, y otros sistemas que no son impositivos y no obligan a los niños a memorizar durante horas.” También hizo un recorrido por las instalaciones del Centro Educativo de La Palapa, visitó la nueva secundaria y tuvo una charla con sus estudiantes y les firmó autógrafos. En la ceremonia del corte de listón gradeció que le pusieran su nombre a la biblioteca y también la invitación a Todos Santos. Se dirigió al matrimonio Higgins en especial y a los integrantes de La Palapa: “Lo que ustedes hacen aquí es una obra de amor… miren este cielo tan espectacularmente azul, es una como una bendición, todos los que estamos hoy aquí debemos estar agradecidos, porque hacer esto es creer en la educación, sobre todo para los niños y jóvenes”. Elena, Elenita de cariño, dejó su nombre en la biblioteca y sus palabras en los corazones de los todosanteños. Su carisma hizo vibrar a los asistentes a las diversas actividades. Para todos tuvo una sonrisa, un gesto amable, una mirada de alegría. Si alguna vez, lector, viene usted a Todos Santos, los primeros libros que verá en la entrada de la biblioteca son los de ella. Los puede tomar, sentarse debajo de la higuera y disfrutar de una de las escritoras más destacadas del siglo XX y lo que va del XXI.
* Autor, docente BCS, Sonora
