Un año de camino y más de cien años de historia.
Comenzaba el 2010, en las instalaciones de la Asociación José Ley Domínguez, en Mocorito, Sinaloa, el presidente de la asociación, ingeniero Carlos Antonio Sosa Valencia, convocó a autores, investigadores, historiadores y periodistas de diferentes regiones del país y del otro lado de las fronteras, para realizar la 4ª etapa del periódico, La Voz del Norte. Los antecedentes del informativo eran subyugantes, por sus raíces históricas de gran valor que engalanaban su existencia, ruta que se inicio el 30 de junio de 1903, en la llamada “Atenas de Sinaloa”, bajo la conducción de editor y profesor- originario de Lagos de Moreno, Jalisco-, José Sabas de la Mora. La propuesta que escuchamos los asistentes a la reunión fue contundente, participar en un semanario con un solo compromiso: La cultura, local, estatal, nacional y universal, bajo un lema comprometedor: De Mocorito para el mundo, del mundo para Mocorito. Al término de la charla con el ingeniero, los participantes llevábamos en la mente un proyecto y una tarea, llena de satisfactores y retos que había que acometer sin demora, como contribución para mostrar el otro lado de la vida, el que informa que es posible construir un mundo mejor.
Las reuniones continuaron con ahínco, se pulieron opiniones de los futuros colaboradores, se afinaron temas, se escucharon diferencias y coincidencias, así llegamos a la última semana de mayo de 2010 y por fin salimos a los lectores. Ha transcurrido un año de camino, un periodo de tiempo que nos colmado de experiencias y que nos une indisolublemente a más de cien años de historia; en el andar se han unido a La Voz del Norte, seres comprometidos con la cultura con principio y destino, lectores que encuentran en las páginas del periódico, un órgano de información que no tiene otro interés que ser un vaso comunicante que enorgullezca a los que participamos en su elaboración y lectura. Por eso celebramos el cumpleaños, por eso felicitamos a lectores, colaboradores, directivos, patrocinadores, distribuidores que han logrado que en el horizonte La Voz del Norte se encuentre presente. Felicidades y que los cumpleaños continúen cayendo como frutos del árbol de la cultura; actividad que enriquece a los que participan en ella, porque alumbra el camino del hombre, porque nos impulsa y nos obliga a ser mejores.