RICARDO SANTOS ALDANA
En 1531, Nuño de Guzmán, fundó o hizo fundar las villas de Purificación en Xalisco, Santiago de Compostela el Tepic, Espíritu Santo en Chiametla, San Miguel en Culiacán y Guadalajara en Nochistlán, las últimas fueron una gobernación separada de la Nueva España a la que Nuño de Guzmán llamó la Nueva Galicia.
La audiencia de Nueva Galicia, fue creada en 1548, con sede en Villa de Santiago de Compostela y trasladada a Guadalajara en 1555. (René Gorcia Castro, Facultad de Humanidades UAEM).
Es en este contexto en que se sitúa, la ubicación del mineral de las vírgenes, en la parte oriental de la provincia de Culiacán, fue en 1531 cuando Nuño Beltrán de Guzmán ordenó a García del Pilar el reconocimiento de los sitios de los naturales de Quezala, un pueblo de acaxees, el capitán José de Angulo, fue el primer jefe español en llegar a la región en enero de ese año y autor de una relación de los descubrimientos.
Los reales de minas, inician en 1545 y en 1550, Francisco Hernández Almendraleja informó que la provincia de Culiacán tenía 25 encomenderos y un número considerable de corregimientos, consignando en su informe la existencia de las minas de San Francisco y las Vírgenes, (nombre que se le dio, al parecer a Quesalla) según Peter Gerhard, la belicosidad de los grupos indígenas, obligaron la despoblación de los reales, solo permaneció el de las Vírgenes en 1569.
Curiosamente en la “Relación de Culiacán” de Gaspar de Osorio, que data de 1570, se consigna; “RODRIGO DE GAMEZ, es hijo de Rodrigo de Gámez, poblador; tiene el repartimiento de TOBOLOTO, que terna quince indios. Y en la sierra hacia Achiota tiene otro pueblecillo que, por no estar tasado ni bien de paz no lo pongo (otatitlán?) y está proveído en el corregimiento de COZALA, con doscientos pesos de salari. Tiene treinta y tres tributarios, valió el tributo como setenta pesos; es soltero, tiene el susodicho un hermano que se llama Diego de Gámez, soltero, y una hermana que se llama Luisa de Gámez, casada con Hernán González vecino de esta villa.”
Hernán González corregidor de BAYLA, está casado con Luisa de Gámez, de ordinario tiene la alcaldía mayor de las Vírgenes de esta provincia.”
Amador López, es vecino de esta villa y minero en las minas de las Vírgenes: anduvo con Francisco de Ibarra en su conquista.
¿Por qué Cosalá, Cozala o Quesalla?
En la crónica de José de Angulo, se menciona, un bonito pueblo, localizado aguas arriba del ríos de la sal, (actual Elota, antes Ceuta) y llamado Quesalla tal vez por los indígenas acompañantes que traía.
En los arroyos que ciñen esta población, existe un hermosísimo pájaro de la familia del quetzal que es el trogón elegante, su colorido plumaje, verde, blanco y rojo, es impresionante e irisdescente.
Siendo un pájaro, admirado en su cultura, tal vez al observar la abundancia de ellos, no dudaron el llamar a la región y al pueblo, abrazado por los arroyos del azafrán, el orito, la cadena, el grande y el chiquito; “quezallán” como lugar donde abunda la belleza.
El vocablo quetzal, es muy utilizado para denotar la hermosura de las cosas así tenemos; Quetzalinxochil (hermosa flor de agave), Quetzaliste, hermosa obsidiana verde, Quetalixtle (hermosa fibra verdosa de maguey).
En algunos documentos religiosos del siglo XVI, se le denominó Real Mineral de la Purísima Concepción de Nuestra Señora de las vírgenes de Cosalá, el 12 de Dic. de 1597, es nombrado cura de las Vírgenes Joan de Palacios. Los levantamientos indígenas, no daban tregua a la población asentada en el Real, pero un evento de humanismo, realizado por los españoles en 1602, al respetar ancianos, mujeres y niños xiximes, lograron la paz, acordada en el atrio del templo en 1602.
En el Real de las Once Mil Vírgenes, los Jesuitas, levanta la parroquia de Cosalá el año de 1602, en el mismo sitio que, tras varias reconstrucciones se erigió la parroquia de Santa Úrsula, esto debido a que Cosalá, ha sido una veta rica de minerales, ubicado en la Sierra de la Plata, que ha funcionado a lo largo de cinco siglos.
Tres años después, el obispo de Durango, Alonso de la Mota y Escobar en visita Pastoral, informaba de la existencia del mineral de las Vírgenes, poblado, con dos haciendas de mulas donde se beneficiaban los metales. Juan Diez de La Calle, oficial de consejo de Indias, en un informe rendido a la Corona, notificaba la existencia del Real de las vírgenes y el corregimiento de Cozala en el año de 1637.
El Sr. Obispo de Durango Don Pedro Barrientos y Lomeli, visito el Curato de Cósala en 1658, encontrándolo vacante de personal.
A lo largo de 3 décadas de 1670 a 1700, se tiene evidencia del nombramiento de tres curas párrocos, para el auxilio espiritual del Real de las Vírgenes de Cósala; Matheo Hernández Pericón, Pedro Bojorquez y Roque de Palomares.
Casi en el final del siglo XVll, se registra el número del vecino, españoles que habitaban el real; El Alcalde Mayor; Bartolomé Campoy, Juan Sánchez, Diego Machado, Francisco Machado, Ignacio de Molina, Gonzalo de Valdivia, Leonor de Molina, Juan Millán, Joseph Romero, Juan de Bohórquez, Joseph de Soto, Joseph de Soto Mozo, Pedro de Vargas, Antonio Vélez de Arce, Ambrosio de Urrea.
El año de 1696, el Sr Obispo don García de Legazpi Velasco y Altamira, visito la iglesia de Cosalá constatando la edificación de un templo mas grande.
Al llegar 1700 la actividad minera del Real de Cosalá, propició el surgimiento de centros poblados que proveyeran de enseres y alimentos a los operarios de minas, como el Potrero, La Estancia, El Rodeo, Cholula, productores de cuero, Ixtle, miel, panocha, quesos, en 1731 se incrementa la producción minera, lo que repercute que el Real de Cosalá, pasa a la categoría de Tenientazgo de Culiacán en 1732.
Don Francisco Xavier de Zayas y Córdoba, personaje importante de este periodo es designado en 1743, Teniente Gral. y Capitán a Guerra del Real de Cosalá, desempeñando sus funciones en el antiguo edificio que es actualmente el palacio municipal, a un costado de la “casa cural” y frente a lo que fue la casa paterna de Francisco Yriarte y Calvo, que después sería de su propiedad colocándole los símbolos del rito masón al que pertenecía.
Al iniciar el siglo XVlll, Antonio Vélez Arce, vecino del Real de las Vírgenes de Cosalá, presentó testimonio ante el alcalde mayor de la provincia, ante un pleito que tuvo con Juan Sánchez por la propiedad de tierras de ejidos del real. En 1714 se elabora un informe que menciona al Real de Minas de Cosalá, como de placeres de oro y minas de plata con algo de población fija.
En 1732 nace en Cosalá José Ramón de Noriega, que en 1767 se desempeñaba como mayordomo de José de Gálvez, en 1760 llegó a California y desempeñó en la administración de la misión de Santiago. Según censo de 1738 existían en el Real 207 tributarios indígenas y 150 tributarios de castas.
En 1750 el visitador Rafael Rodríguez Gallardo, notando la dispersión del real de Cosalá, dio instrucciones al cura padre Vicario y Juez eclesiástico, para que se facilitara la agregación y congregación de los vecinos y que fabricaran sus casas contiguas con división y separación de calles, en la mayor disposición que permita el terreno y; para la ejecución de todo le impuso al Justicia Mayor, Francisco Xavier de Zayas y Córdoba, el término de cuatro meses.
El Obispo de Durango, Pedro Tamarón y Romeral, en su primer visita episcopal al Real anotó la existencia de 256 familias, un total de 1897 personas y que aquí iniciaba la provincia de Culiacán, en su segunda visita en 1768, lo recibió el cura bachiller Juan Domingo Ureña visitó altares, sagrario, pila bautismal y santos óleos registrando las medidas de la iglesia en 25×10 varas y otra semiconstruida de 50×10.
El año de 1766 es nombrado Teniente de Justicia Mayor, Don Tadeo Fernández Tamayo, acaudalado minero.
El desarrollo minero y descubrimiento y denuncio de más minerales ocasionan que en 1771, Cosalá se convierta en Alcaldía Mayor, Independiente de Culiacán, siendo la autoridad; Don Cristóbal José de la Vega.
Varios vecinos salen a colonizar San Diego, Santa Bárbara, San Carlos y Los Ángeles en 1777, alcanzando Felipe de Goycochea el grado de comandante del presidio de Sta. Bárbara.
Para 1786, Cosalá se convierte en subdelegación de la intendencia de Arizpe y en 1792 el subdelegado era el rico minero; Ignacio Abdón Fernández Tamaio.
En diciembre de 1795, se convoca a los mineros de la región y se vota por representante ante el tribunal de minería, en casa del señor Favela nombrando a José Corral, operaban en esta época 68 minas y 16 haciendas.
El subdelegado Manuel de la Fuente rinde en 1796 un informe sobre la situación religiosa en el Real de Cosalá a la Delegación de Arizpe.
En el Real de Cosalá, el 4 de Julio de 1799 contraen matrimonio en casa de Nicolás Ma. Gaxiola, Francisco Yriarte y María Josefa de Jesús de Eseverri, él, un destacado personaje, que llegaría a ser gobernador del Estado de Occidente, gobernador del Estado de Sinaloa, introductor de la imprenta en Sinaloa y Padre del Estado de Sinaloa, en virtud de la tenaz lucha que sostuvo por la independencia y soberanía de la entidad.
la llegada del siglo XlX, impactaría la vida del mineral al descubrirse la rica veta de la Estaca y la descubridora y nombrar al paraje donde se construyeron soberbios edificios; Guadalupe los Reyes, en alusión al día 12 de dic. y 6 de Enero, respectivamente.
La gran producción que registró el mineral de Guadalupe ocasiono que la caja Real del Rosario, se desplazara a Cosalá en 1805 y que en el torbellino del movimiento de Independencia, el padre de la patria; Don Miguel Hidalgo y Costilla, instruyera a José María González Hermosillo la toma de Cosalá y la apropiación de las pastas de plata existentes para el sostenimiento de la lucha por la independencia, órdenes que no se cumplieran por la derrota en San Ignacio asestada a la insurgencia por el gobernador de Sonora Alejo García Conde y su batallón de indígenas ópatas, en los primeros días del mes de Febrero de 1811.
En 1824 se instala el Estado de Occidente, teniendo su Capital en el Fuerte y, ante el levantamiento de indígena yaquis y mayos, se trasladó la capital del vastísimo territorio al Real de Cosalá, instalándose desde el 29 de Agosto de 1826, hasta fines de 1827, sosteniendo en esta etapa el Gobernador Francisco Iriarte Calvo, una intensa confrontación con la legislatura, que se oponía a la ubicación en tan alejado sitio; el Real de Cosalá y a la división del Estado en dos Entidades; Sonora y Sinaloa, que promovía el gobernador y que tuvo finalmente, el respaldo legal de los ayuntamientos para llevarse a cabo, pero el Congreso Nacional, no respaldó tal decisión, por no cumplir con reglas constitucionales.
La instalación de la capital en Cosalá, ocasionó que Sr. José Felipe Gómez, editara en 1826 un periódico llamado “El Espectado, Imparcial” que en razón de ser el primero en el noroeste de México, dio a Cosalá la categoría de “Cuna del Periodismo Sinaloense”.
En 1830 una terrible epidemia azota el Real de Cosalá siendo insuficientes los servicios religiosos de un cura para auxiliar a los enfermos, se solicita otro sacerdote.
A pesar de estar protegido, el valle donde se asienta la villa de Cósala por la serranía de Barreteros y los cerros de San Nicolás, La Cobriza y el Palmar, un huracán azota la población en 1852.
Para proveer de explosivos a la milicia y a los minerales de las cercanías, es establecida una fabrica de pólvora en la villa.
Durante la guerra de los tres años, una vez más la vida cotidiana se perturbó por el cruento combate que se tuvo en las mimbres el 13 de Marzo de 1859 entre los grupos liberal y conservador, saliendo triunfador el primero de ellos, este año Francisco Madrazo apresa al prefecto José María Zevada y quema el archivo al grito de “Religión y Fueros”.
Siendo Gobernador del Estado el Sr. Lic. Eustaquio Buelna Pérez que estuvo avecindado en la Villa se abre el camino que comunica cosalá, con Elota.
Don Cleofas Salmón quien tuvo una destacada intervención en la batalla de San Pedro, donde se derrotaron a los franceses el 22 de Dic de 1864, es nombrado prefecto ´político y comandante Militar para abatir a diversas partidas de bandoleros que atacaban el Real.
En 1870 nace Celso Vega, militar que llegaría a ser Gobernador del territorio de Baja Calif. Nte. Una sangrienta batalla se libra en la calle de en medio (Hoy Rosales) entre tropas del coronel Jesús Ramírez Terrón y las fuerzas del coronel Cristerna, arrojando un considerable número de muertos, entre ellos, el Coronel y por no tener deudos, según información oral, fueron sepultados en la noria del Cuartel quemado, ubicado al costado oriente de la presidencia Municipal, en enero de 1877.
Nace en Cosalá, Carlos Cruz Echeverría, quien seria gobernador de Sinaloa en 1912 y del Territorio de Nayarit en 1917 por órdenes del Gral. Venustiano Carranza.
En 1880 son suprimidas las prefecturas y se cambian por directorios políticas, se concluye la torre de la parroquia y amplía la plaza en 1887.
En 1883 una terrible epidemia asoló a la villa, un súbdito prusiano da la muestra de benefactor; Bruno G Symansky la zozobra se apodera de la villa durante varios años por la implacable persecución que las fuerzas del gobierno y mercenarios, realizan para capturar vivo o muerto a uno de los más legendarios personajes, cuyo escenario principal lo fue Cosalá y los alrededores; Heraclio Bernal Zazueta” ”El Bandido Generoso”, “El Rayo de Sinaloa” “El Precursor de la Revolución”, etc. Y en cuya memoria se han escrito; libros, novela, ensayos y documentales y filmado películas alusivas.
Doña Francisca Batíz, cosalteca de nacimiento, era la esposa del General Francisco Cañedo Balmonte, de la Bayona Nayarit, amigo personal de Porfirio Díaz, gobernó Sinaloa más de 30 años y en su honor el Parque central de la Villa, se denominó “Gral. Francisco Cañedo” nombre que permanece.
En 1889, se nombra a Ricardo Carricarte, prefecto de Cosalá y su obra; que de manera intensa, realizo por donde se desempeño es admirable, destaca en Cosalá, La aplicara del Panteón San Juan Nepomuceno, en la salida oriente de Cosalá.
De 1900 a 1910 reinó la tranquilidad social, después de un siglo de revueltas, asonadas, asaltos, tomas, y rebeliones que se interrumpe con la entrada por la loma de San Juna Narciso Lares, proveniente de Amaculí y, al tomar la plaza es rechazado y muerto por las tropas allí acuarteladas, se pronuncian Genaro Vázquez y Claro G. Molina, quien al tiempo estuvo en el E.M de Francisco Villa.
En el barrio de el azafrán en julio de 1907, nace Enriqueta Valenzuela; “La mona Rico” que triunfó en el arte cinematográfico de Hollywood, participando en películas del cine mudo, entre otras; Enternal Love, El conquistador y la marea del zorro en 1937.
El 14 de febrero de 1916, frente a la prefectura, nació el niño Leopoldo Sánchez Celis, forjado en el pueblo en Estado en 1963-1968, en cuyo gobierno, se construyó la carretera que unió a Cosalá, con la carretera internacional, acabando con el aislamiento de siglos de la villa de Valenzuela se le llamó villa de Valenzuela en honor a Ángel Valenzuela muerto en la batalla de San Leonel, Tepic, Nayarit.
La primer presidenta municipal mujer Alejandra Retamoza Reynaga, gobernó Cosalá de 1963-1965.
Cae en un letargo la Villa ocasionado por el cierre de las minas, pero se recupera con la construcción de la presa El Comedero en 1981 Conservando su belleza arquitectónica del siglo XVIII, Cosalá recibe el distintivo del pueblo Mágico por SECTUR en Octubre de 2005, se inscribe en la lista indicativa de Patrimonio Mundial el año 2004 y es declarada Patrimonio Cultural de la Nación el año 2000.
* Cronista de Cosalá Sinaloa