CARLOS LAVÍN FIGUEROA
Este 10 de abril se cumplen cien años de la traición y cobarde asesinato de Emiliano Zapata, su legado es sin duda el Plan de Ayala, documento que por su importancia social dio la vuelta al mundo cuando germinaba la primera revolución del siglo XX,cuando el Gobierno Federal calificaba a los zapatistas de salteadores de caminos, violadores y roba vacas. En contraparte, Zapata encomendó a su cercano Otilio Montaño un plan para dar a conocer sus ideales y cambiar la imagen que de sus tropas se tenía en la capital del país. Montaño se lo solicitó al abogado, filántropo y poeta Salustio Carrasco Núñez, vecino de Iguala Guerrero y oriundo de Mazatlán Sinaloa, quien supo plasmar los ideales del líder Zapata. Sobran antecedentes, evidencias y datos dela relación de Carrasco con Zapata y Montaño en Villa de Ayala; de cómo y cuándo Carrasco llamó por telegrama urgente desde Iguala a Ávila Díaz para su redacción. Ávila, quien había sido maestro de Zapata, se encontraba en Taxco llegando esa misma noche a caballo con su ayudante personal Pérez Cortes, quien aporta fechas; detalles hasta horas en que fue redactado en casa del juez Paulino Ruiz, donde Carrasco,las noches del 26, 27 y 28 septiembre de 1911, con una copa de coñac en la mano, dictaba el documento a Ávila Díaz quien lo escribía; de cómo y cuándo se envió oculto a Morelos. La persona que lo trajo fue fusilada por federales en la Hacienda del Hospital después de hacerlo confesar, y sabiendo quien fue el autor, Carrasco fue asesinado, la misma suerte correría Ávila Diaz. Sobre la supuesta autoría de Montaño y otros, solo hay vagas menciones sin sustento.
En Chilpancingo,Carrasco había sido activista contra el régimen de Porfirio Diaz, ahí, fue perseguido por el coronel porfirista Victoriano Huerta y su tropa por estar en contra del candidato de Diaz a gobernador de apellido Mercenario. Emigrando, llegó a protegerse a Villa de Ayala donde vivió por casi dos años, de enero de 1900 a 1901, donde fue protegido por el viejo líder agrarista Luciano Cabrera antecesor de Zapata. En Ayala conoció a Montaño y fue maestro del caudillo, ahí,asesoró a los campesinos ante los tribunales para la recuperación legal de sus tierras, ahí, fechó quince poemas publicados en su libro “Nublos y Estrellas” -que poseo autografiado por Carlota, la hija de Carrasco- donde se destaca como conocedor de los clásicos de la literatura universal. La autoría de Carrasco se ha mencionado en publicacion es de corto tiraje en el Estado de Guerrero, donde formales historiadores le abonan la autoría y aseguran que el Plan es del mismo estilo literario de sus poemas épicos, donde utilizalas mismas palabras; como dictadura, justicia, tirano, déspota, cadenas, esclavos, yugos, bienestar, patria, espada, Dios, libertad. Algunos de sus poemas son; POR LA JUSTICIA (Pro Justicia), y LUCHAREMOS (1894); A LA FRATERNIDAD NACIONAL (1909); REO DE INFAMIA, ODA, y 16 DE SEPTIEMBRE (1910); REDENCIÓN; TOQUES DE CLARÍN y AL PADRE DE LA PATRIA (1911); PRO LIBERTAS, PALMA Y LAUREL y ¡OH DIOS! (1893).En Ayala escribió; CRISTO (1900);DESDE EL CALVARIO – ROMANCE PATRIÓTICO e HIMNOS DE ALIENTO (1901).
Décadas después, de cómo fue la autoría del Plan, fue narrado por el testigo presencial Pérez Cortés-quien escribió esos hechos en un detallado memorial, del que poseo copia-a mi viejo amigo ingeniero Don Andes López Velazco -QEPD-respetado presidente vitalicio de la Asociación Nacional de Cronistas de Ciudades Mexicanas A.C. y ex guerrillero lugarteniente de Genaro Vázquez Rojas.
Ya recibido de abogado, Carrasco, se instaló en Iguala donde siguió asesorando a Zapata ante los tribunales, antes de que estallara el conflicto armado.
El documento, apegado a la historia, al igual que sus poemas, lo hacen único en su género, en el, su solución y alcances, califica al presidente Madero de inepto y traidor a los revolucionarios que lo ayudaron con su sangre a llegar a la presidencia llamándolos bandidos y rebeldes; lo señala de no cumplirles sus promesas y lo desconoce como presidente.
A petición del Plan, Madero destituye al General Ambrosio Figueroa como gobernador de Morelos, lo llama a Palacio Nacional, lo nombra Jefe Militar de Iguala donde vivía Carrasco, lo manda con “una importante comisión”. A unos días de llegar Ambrosio a esa ciudad, Carrasco fue detenido por fuerzas federales, y a unas horas, en la madrugada es vilmente asesinado sin juicio ni causa, hay datos, lugares y fechas, Figueroa envía una carta a Madero informándole del “fusilamiento” de Carrasco. No se dio motivo de su asesinato destrozándole la cabeza de un balazo de grueso calibre y a culatazos, dándose otras razones para no involucrar al presidente. Días después se levantó un acta con la fecha del “fusilamiento”, y después otras, pero sólo ante las protestas de la población y de distinguidos igualtecos que fueron a Palacio Nacional a protestar ante Madero ese acto cobarde, la nota periodística de primera plana fue; “La comisión fue recibida de inmediato, pero salió desilusionada por el frio trato que les dio el presidente”.El asesinato del culto abogado fue noticia en periódicos nacionales durante varias semanas.
El Plan lo envió Carrasco a Montaño, fue interceptado por retenes zapatistas cuando era traído a Morelos y entregado directamente a Zapata, “gustándole al caudillo de sobre manera” dijo su sobrino Maurilio, quien era jefe de su Estado Mayor, el caudillo se lo entregó a Montaño, quien, le agregó leves modificaciones para adecuarlo a las circunstancias del momento ya que fue promulgado dos meses después de su redacción, y fue quien lo leyó en la proclama del 28 noviembre de 1911, y de ahí, la tropa le atribuyó su autoría.
Montaño, maestro y compadre de Zapata, fue fusilado previo juicio hecho por zapatistas, autorizado por el caudillo, las razones fueron; traición al Plan de Ayala y a la causa revolucionaria. Antes, Zapata se había asegurado que Montaño intentó desconocerlo como jefe del Ejército Libertador del Sur, lo que sólo era posible asesinándolo.
En el centenario del documento, el entonces director de Investigaciones Filosóficas y la directora de la Facultad de Filosofía de la UNAM, en una conferencia en Cuernavaca, fundamentaron que, por su espíritu de legalidad y justicia, donde se condensan tradiciones históricas y filosóficas, sólo pudo ser redactado por un culto abogado, conocedor de la literatura universal y enterado de temas de actualidad mundial, de lo que carecía el maestro rural de primaria Otilio Montaño. Varios artículos de nuestra Constitución, 3º, 27 y 123, surgen del Plan de Ayala.
La lucha zapatista continúa vigente y el Plan de Ayala su bandera, los campesinos siguen siendo desposeídos de la tierra, el agua, y con ello del alma. Al igual que Zapata, sus líderes siguen siendo asesinados; Rubén Jaramillo, recién Samir Flores por estar contra la termoeléctrica de Huesca en Morelos, Noé Jiménez, Isidro Baldenegro, Miguel Ángel Vázquez, Antonio Esteban defendieron su identidad, su historia emocional, intelectual y hereditaria.
P.D. Hasta el otro sábado
* Historiador y Cronista de Cuernavaca