SOFÍA MIRELES GAVITO
Hay una tradición en Tonalá que tiene más o menos 70 años y ha perdurado hasta nuestros días, me refiero a la despedida del Año Viejo. Y es que el día 31 de diciembre a las doce del día, los ferrocarrileros activos y jubilados organizan la celebración, se pasean por las principales calles de la ciudad; la fiesta se caracteriza por el paseo del año viejo, que es un muñeco de trapo hecho con ropa vieja, acompañado de la “viuda negra”, que es un ferrocarrilero vestido de mujer, exagerando el busto y la cadera. Y el año nuevo, es un muñeco de plástico vestido con su pañal. El recorrido lo hacen con banda de música y tirando cohetes; los ferrocarrileros van bailando y la viuda alegre baila con los parroquianos.
También, algunos barrios de la ciudad de Tonalá se han organizado para festejar la despedida del año viejo y el advenimiento del nuevo; para ello, durante el transcurso del año organizan rifas y kermeses para recabar fondos, algunos promueven eventos sociales como la coronación de la reina del barrio. El día 31 de diciembre engalanan las calles de los barrios con banderitas y series de focos de diferentes colores, se cierran al tránsito de vehículos, se barren y se culmina con una cena-baile que amenizan los diferentes grupos musicales.
Las autoridades municipales contratan conjuntos que tocan música tropical o de banda en el Parque Central después de medianoche. A las 12 en punto, el Ayuntamiento ordena que se quemen cohetes, luces de bengala y juegos pirotécnicos en la azotea del Palacio Municipal. Además, la mayoría de las familias tonaltecas también tiran cohetes y luces de bengala en punto de las 12 de la noche.
Al día siguiente, primero de enero, todo mundo se va a las playas de Tonalá, ya sea Puerto Arista, Playa del Sol o boca del Cielo, a comer y disfrutar el sol y la arena; quedando la ciudad desierta, es decir, sin mercado y sin tiendas abiertas. Igualmente, muchas personas de la capital del Estado, Tuxtla Gutiérrez, vienen a disfrutar de las playas del municipio.
* Cronista de Tonalá, Chiapas