Por: Ernesto Rios Rocha
Este día cállate y escucha, deja de juzgar y observa; cierra tu pequeño mundo y ve la grandeza de la tierra que has pisado.
No interrumpas la actividad del universo con tus pequeñas ideas, deja que te quite lo que no necesitas y te traiga lo que ocupas…tu solo suelta y recibe, el sabio soy yo.
El que quiera enseñar deberá ser maestro. El que quiera iluminar deberá ser iluminado. El que quiera perfeccionar deberá ser perfecto. Empieza contigo, no puedes dar lo que no tienes.
Me quedé callado y no pude decir nada. Me dijo – llámame padre universal.
Dios es, para ustedes, todo amor; el que los saca de la miseria y los llena de salud en la juventud y los buenos momentos de la vida, pero dejan de creer en él cuando la miseria les regresa, cuando les llega la vejez, las enfermedades y la inevitable muerte; entonces se les vuelve como un dios despiadado en sus mentes y pierden la fe cuando llega la angustia.
Yo no soy ese. Yo no estoy para evitar que vayas a la tumba, si no para levantarte de esta después de ser enterrado. No estoy para quitarte la miseria que te lleva a la tumba, si no para resucitarte de la tumba. Mi promesa no es humana si no celestial.
Entonces pregunté sorprendido ¿Porque hiciste los dos caminos bueno y malo sin darnos discernimiento de cuál elegir? y he aquí tus hijos los seres humanos equivocados de camino, encaminados a la muerte, condenados al sufrimiento, al seol.
Él respondió con preguntas. ¿Qué pasaría si les hubiese dado solo el camino del amor? ¿Qué pasaría si solo hubiese una opción de vida, el amor? No pudiesen decidir, no se equivocarían.
¿Porque hice dos caminos? ¿Con que fin arriesgo a mis hijos a la equivocación y al seol? Para que puedan decidir, para que tengan voluntad, para que aprendan de los errores; para que aprendan a distinguir el buen camino del malo y de esa forma puedan guiarse y guiar a los demás. De hecho habrá algunos de ustedes que después de resucitados regresen al mundo terrestre a guiar a sus hermanos.
Cuando a tu hijo le muestres solo el camino del amor, cuando le quites las piedras del camino; entonces no verá tropiezo y no distinguirá lo bueno de lo malo. Muéstrale los dos caminos y déjalo decidir en el momento que le toca. No le salves la vida humana, resucítalo a la eternidad; no llores su partida, alégrate de su regreso a una mejor vida.
Padre – dije – si el que está en la tierra no eres tú, ni tu hijo derecho, entonces ¿Quién es? ¿Acaso tú no lo eres todo? ¿Acaso no estás en todos lados. ¿Acaso no eres tú la misma oscuridad.
Entonces me contestó- No. Eso es mi cuerpo. Es mi universo, es mi creación. No yo. La oscuridad es una enfermedad necesaria solo para los mundos planetarios.
No entiendo – dije-
Así como el pecado mora en tu cuerpo y es necesario que more, pues así tu cuerpo no eres tú, si no que tú eres el que dirige tu cuerpo, ese eres tú. De la misma manera mi cuerpo es todo lo que hay, luz y oscuridad y yo lo dirijo; pero yo soy yo, no mi cuerpo.
El Dios de ustedes no soy yo, son ustedes mismos. Sus propios personajes son su Dios. Mi hijo fue y lo mataron, después lo comercializaron; él es mi mano derecha.
Ustedes son mi hijo Satán, mi otro hijo; el izquierdo. Él es para algunos, el Dios. Para otros, ustedes mismos’’.
Entonces dije -Sé que no tienes nombre. Por favor Defínete, yo escucho.
Ya lo hice-contestó- Soy tu fe en los demás. ‘’Soy el acto de bondad’’ esa es mi memoria. Ese es mi mensaje. Mis decisiones son evolutivas no son fechas. Yo te he creado, de ahí todo lo que hagas será tu futuro. Mi hijo interviene con amor si te acercas. Ábrete para ellos. No te cierres para ti. Date, no te apoderes. El ego está en el centro, entre la oscuridad y la luz. Muévete de ahí. Ponte en la luz. Deja tu ego.
Nada hay imperfecto. La misma imperfección es perfecta, es parte de un orden perfecto y sus oscuridades solo sirven para reconocer sus propios errores y no caer de nuevo en ellos. Satán es tan necesario como Miguel para ustedes. Tú eres lo que has querido ser, no lo que quiero que seas.
Yo nací un día y el vientre en el que nací y fue una mente, nací en diferentes fechas y en diferentes planetas y en diferentes mentes, ese soy en ustedes. Yo nací en la mente de ustedes. Ustedes me crearon en sus mentes y ahora soy grande y soy el creador de ustedes.
Cuando yo nací en ustedes yo ya los había creado, pero ustedes me crearon imperfecto porque así son, a como ustedes son así ustedes crean todo, imperfecto. Pero yo nunca nací, si no que para ustedes nací cuando me percibieron en sus mentes, y aun sin nacer existo desde siempre y para siempre.
Yo no soy ningún Dios de ustedes porque los que ustedes crean no son perfectos. Debo decirte que la perfección es la amistad entre el bien el mal. El bien y el mal nunca se pelean si no que uno necesita al otro, sus guerras, y choques explosivos es su naturaleza; los dos forman unidad. Todo es dual y esa es la perfección.
Pero ustedes crean guerras entre Dios y el diablo, precisamente cuando ellos se aman, precisamente cuando uno le da un golpe necesario al otro para formar el choque de la chispa divina positiva y negativa. Ustedes se independizaron y me confundieron con el oro y con las brillantes perlas superficiales.
Usaron el ego y no la misericordia. Puedes entender todo, pero escucha ahora mismo lo más importante: “la existencia no existe, solo es una inyección sensorial” Sé que no lo entiendes pero al despertar de nuevo a la carne, lo entenderás.
Ahora mismo no estás en ningún lugar, quizá puedes estar tirado en alguna banqueta de un mundo, o quizá podrías estar dirigiendo a una multitud; pero hoy te digo que no eres nadie, no estás aquí y yo no soy yo.
Sé que sigues confundido, pero ahora mismo te aclaro que eres información, archivos que te hacen existir, sensores que te dan una personalidad que si bien no existe, te hará pensar en lo contrario.
Tú brillante, fuiste tomado de los humanos porque la combinación numerológica de las frases de tus archivos, tuvieron a bien formar una historia ordenándose inteligentemente, a lo cual visto por mi unigénito, le ordené inyectarle una solución que te abriría esta visión; la visión del viaje a mi corazón.
Todo ser que se mueve independiente, piensa; pero la independencia no existe porque todos dependen. Las moléculas de los átomos, los átomos y células de los seres, los seres de los mundos, los mundos del universo y el universo de mí y yo de ustedes; debes entender que todo lo que existe, es unidad y la unidad un todo, es una sola cosa siendo muchas; no puedes descompletar la perfección quitándole el desequilibrio, porque la imperfección, es parte de la perfección.
* Pintor, escritor, narrador y pedagogo.
