JUAN MÁRQUEZ DEL RIVERO… Un modisto de alta costura reconocido en su país y en el extranjero

Por: Juan Manuel Veliz Fonseca

Juan Márquez, nació un 24 de junio de 1927, en San José de Gracia. Así lo estipula su acta de nacimiento dice, que fue registrado en la oficina de registro civil de Sinaloa de Leyva en el año de 1950, como hijo de Micaela Márquez y aparece como testigo don Abundio Armentilla, de oficio policía quien se consideraba de la familia. Su carta de presentación era la de Juan Márquez del Rivero. Cuando bajan de San José de Gracia primero llegan a la villa de Sinaloa, él en brazos de su madre de nombre Micaela Márquez, siendo un niño de sólo un año de nacido. Ella, su hijo y otras familias más habían abandonado el rico mineral de San José de Gracia, lugar donde se extraía el oro de más alta ley (en 24 Quilates) del noroeste del país. Las compañías mineras nacionales y extranjeras que allí trabajaban fueron severamente golpeadas por la crisis económica en esa época, y por los grupos de alzados que existían en esa región que a cada rato asaltaban. Aquel rico emporio minero se terminó. La señora Micaela decidió quedarse en la villa de Sinaloa ya que su estado de salud era crítico; “vivían de arrimados” con doña Otilia Armentilla y al poco tiempo murió. Las Armentillas hacía tres meses habían perdido a su hermano mayor don Pedro Armentilla, eran hijas de don Ambrosio. Su domicilio era por la calle Obregón (antes calle Principal) esquina con la Avenida Corregidora (antes callejón Canta Ranas). Además compartía en ese mismo terreno hacia arriba con la calle Francisco I. Madero (antes calle de la Parroquia) esquina con el mismo callejón, y barrio de La Choya; en medio del solar había una casa de terrado donde ellas elaboraban el pan y lo cocían en un horno de buen tamaño, al que atizaban con leña de mezquite y Brasil, del cual barrían sus brasas con escobas de cacaragua. Sus hermanas también murieron solteras, de oficio panaderas, María y Justa Armentilla; ellas eran reconocidas en la villa de Sinaloa por su delicioso y famoso pan que llamaban “Puchas y Marquesotas”. Por las tardes las familias en ese entonces salían a sentarse en las banquetas a disfrutar su café “de talega”, una mesita con una canasta, sus panes, ya sea una “pucha” o una “marquesota”, que elaboraban estas señoras. ¡Qué tiempos aquellos! me dice doña Triny Montoya Urquídez. El niño Juan Márquez del Rivero se creó en este ambiente, en el barrio de La Choya y era reconocido como “Juan Armentilla” o bien como “Juanito de La Otilia”. Nos cuenta la profesora Guadalupe “La Pita” Camacho Gámez lo siguiente sobre este personaje: “Ese niño que crió mi hermana Otilia, fue hijo de una señora que le pidió posada, porque estaba muy enferma; había bajado de la sierra. Creo que era de los rumbos de San José de Gracia y murió en su casa dejándolo huérfano y sin parientes. Ella se hizo cargo de él. Ese niño creció aquí en el barrio de La Choya y la gente de aquí, del pueblo de Sinaloa de Leyva, lo identificaba como “Juanito de La Otilia”. Todos los de la casa y del barrio lo queríamos ya que era un joven muy servicial. Fue ayudante del padre Ismael Duarte en la iglesia de San Felipe y Santiago. Ya muchacho se fue a Estación Verdura donde vivía mi hermana Julieta “Coleta” Camacho Gámez (quien estaba casada con Melchor Fonseca) fue quien le enseño costura. Ella conoció a Juan desde niño, pues vivíamos a un lado de la casa de la Otilia. Allí se enrolo en un circo y después de andar por todo el país se fue a radicar a la ciudad de México. Allá estableció su oficio de modisto, donde muy rápido se convirtió en el preferido de políticos y artistas de esa época con el nombre de Juan Márquez del Rivero. El murió como en el año de 1986, en la ciudad de Mexicali”.

Luego entrevisté a Adolfo “El Nini” Sarabia y me relata lo siguiente: “A él lo miramos como de la familia, ya que vivió con mi tía Julieta; por eso cuando llegué a estudiar a la ciudad de México en el año de 1970, visité su negocio que estaba ubicado en la salida del metro Insurgentes, a un lado de la glorieta, de la Zona Rosa, no recuerdo la calle que desembocaba por allí. En la entrada estaba empotrado su busto de cobre y unas letras que anunciaban “Alta costura, Juan Márquez del Rivero”. Cuando estuve en su negocio íbamos, Armando “El Babayo” López y yo; no fue posible localizarlo en ese momento, había salido, al extranjero. Sólo había algunas trabajadoras de costura y una persona, quien le administraba, de nombre Arturo. A él lo recuerdo porque en 1967, anduvieron aquí en Sinaloa de Leyva tramitando con la oficial del Registro Civil Agustina “La Guty” Montoya queriendo modificar legalmente- su acta de nacimiento y agregarle el apellido del Rivero, la ocupaba para volver a tramitar el pasaporte ya que viajaría hacia Europa y quería hacerlo como Juan Márquez del Rivero. En una de las tantas visitas a su negocio nos encontramos con Libia Zulema López Montemayor, que fue compañera de Armando cuando estudiaban la prepa en Guasave. Había ganado el concurso de Señorita Mis México, incluso después nos enteramos de que Juan Márquez del Rivero era quien le elaboraba sus vestuarios, así como a muchos artista de cine”. Termina comentando Adolfo Sarabia, mejor conocido para sus amigo como el “Nine”. Espero hayan gustado mis comentarios y entrevistas sobre este personaje que nació en el municipio de Sinaloa y que gracias a sus conocimientos, actitudes y habilidades alcanzo el éxito a nivel nacional e internacional.

* Cronista de Sinaloa de Leyva