Por Juan Cervera Sanchís*
ROTO
Era un juguete magnífico, era armónico y perfecto, pero alguien lo rompió, alguien rompió el universo y ahora es un caos de añicos quejumbrosos e inconexos.
Ahora el universo es un extraño cementerio de soles y de planetas y dolientes hoyos negros.
Era, fue…y ahora es el universo un juguete hecho pedazos por un viejo loco y ciego; un viejo Dios caprichoso y soberbio que se cansó de jugar aquel armónico juego y buscó en la inarmonía y en los añicos dispersos, con infinito egoísmo, el placer de lo perverso.
TESTIMONIAL
Viajaban en el mismo tren
y en el mismo vagón,
pero estaban
a siglos sombras
el uno del otro.
Así suele suceder
con doliente frecuencia
intransitable
en este mundo nuestro.
Viajaban y viajaban
y seguirán viajando
en el mismo tren
y en el mismo vagón
y siempre estarán lejos,
lelos, lejos muy lejos
el uno del otro.
**Poeta y periodista andaluz.