Por Sofía Mireles Gavito*
Los Cronistas de Veracruz, A.C., invitaron a su XXXII reunión los días 28, 29 y 30 de marzo del presente año en la ciudad de Martínez de la Torre con el tema: “Personaje de mi pueblo”. Los cronistas de Veracruz organizan cada seis meses una reunión para presentar trabajos y tratar asuntos relacionados con su Asociación.
En esta ocasión, estuvieron presentes cronistas del estado anfitrión, además como invitados llegaron cronistas de Sinaloa, de Tamaulipas, de Chiapas, del Estado de México (Texcoco), y de Morelos. En total fueron más de 60 cronistas los que participamos en esta reunión.
Los Cronistas de Chiapas salimos de Tuxtla Gutiérrez el día jueves 27 de marzo a las 7 de la mañana, y llegamos a Martínez de la Torre después de las 8 de la noche. Nos hospedamos en el hotel sede del evento. Al día siguiente, después de desayunar nos inscribimos, luego nos llevaron a conocer la exportadora de Cítricos Cadillo S.A. de C.V. Esta empresa se inició en 1995 en la localidad de Cadillo, Veracruz, y luego se estableció en el año del 2001 en la ciudad de Martínez de la Torre. Se dedica a la producción y comercialización del limón persa.
Muchos de nosotros pensábamos que Martínez de la Torre se dedicaba nada más a la producción de naranja, pero aquí nos enteramos por el dueño de esta empresa exportadora que Martínez de la Torre tiene el primer lugar en la exportación de limón persa y se exporta a Estados Unidos, a la Unión Europea, Canadá y Japón. Esta empresa es familiar, tiene más de 150 hectáreas de limón persa sin semilla, y reciben para exportar la producción de amigos y afiliados a la empresa que tienen más de 200 hectáreas.
Todas sus plantas de limón persa son tratadas con los métodos más avanzados de las prácticas agrícolas para controlar el 100% del virus de los cítricos; y así recolectar un fruto sano todo el año.
Cuidan el color, la textura, el grado de maduración y la apariencia para que el consumidor final prefiera el limón persa mexicano. Lo comercializan en cajas de cartón de 10 y 40 libras.
La inauguración de la XXXII reunión se hizo a mediodía en el Restaurant “Cuco”, el Presidente de la Asociación Nacional de Cronistas de Ciudades Mexicanas, el Dr. Melchor Olguín fue el que inauguró la reunión.
Se comió y luego se leyeron los trabajos del 1er. Bloque de ponencias. Aquí nos tocó leer nuestros trabajos a la mayoría de cronistas chiapanecos, quedando pendientes tres de nuestros compañeros, que les tocó el sábado 29 y el domingo 30.
Después fue la cena de gala en la hacienda La Soledad, actual sede del DIF municipal. Llegó el Presidente Municipal Lic. Rolando Olivares Ahumada, convivió con los cronistas y posteriormente nos entregó reconocimientos de huéspedes distinguidos.
La historia de la hacienda “La Soledad” es muy interesante y según nos comentó el Ing. Igrael Gómez Rousell se remonta hasta el periodo colonial cuando la Corona Española asignó estas tierras llamadas “Llanos de Almería” al Sr. Baltasar orantes en el año de 1567.
Se cultivaba vainilla, cacao, caña de azúcar, tabaco, maíz y café. Luego, fue abandonada por falta de mano de obra, para luego el Virrey Félix María Calleja se lo adjudicara.
Cuando se consuma la Independencia de México, el Gral. Guadalupe Victoria solicitó estas tierras y la Legislatura de Veracruz se la adjudica el 27 de octubre de 1842.
Guadalupe Victoria le agrega la hacienda “El Jobo”, la cual había comprado el 14 de diciembre de 1825. Victoria llegó a poseer 60,000 hectáreas.
El Gral. Guadalupe Victoria fallece el 21 de marzo de 1843 en Perote, Veracruz; y Don Rafael Martínez de la Torre compra el 23 de septiembre de 1857 todas las tierras que pertenecieron al ex Presidente de México, que abarcaba haciendas y rancherías como Paso de Novillos, hoy Martínez de la Torre; Zopilotes, hoy San Rafael; la finca La Providencia que perteneció al Gral, José María Mata, Diputado Constituyente en 1857.
Tras la muerte de Rafael Martínez de la Torre, la propiedad se fue fraccionando, pasando a manos de otros propietarios.
La hacienda La Providencia la compró don José Casazza Baviera; y está ubicada en la margen derecha del río Bobos.
El Sr. Casazza construyó un casco de hacienda de estilo francés con teja plana y corredores a los lados, en frente de lo que hoy es la ciudad de Martínez de la Torre.
En 1940, el Gral. Manuel Ávila Camacho, ya siendo Presidente de la República, compró la finca y le cambió de nombre por el de “La Soledad”, en honor de su esposa: Soledad Orozco.
Ávila Camacho ordenó la remodelación del casco de la hacienda por un estilo colonial. Al fallecer Don Manuel Ávila Camacho, la hacienda pasó a ser de su esposa y después a la Secretaría de Agricultura y Recursos Hidráulicos. Actualmente, el edificio está ocupado por el DIF Municipal, perteneciendo al Municipio de Martínez de la Torre.
El sábado 29 de marzo nos tocó visitar el Castillo Militar, donde se dio lectura al 2º. Bloque de ponencias; ahí mismo, nos ofrecieron una suculenta comida.
Poco después, regresamos a Martínez de la Torre a dar lectura al 3er bloque de trabajos, para finalizar el día con una exposición de monedas y billetes mexicanos y cena en el Parque Central de la ciudad.
El domingo 30 nos trasladamos, otra vez, a la finca La Soledad para leer los últimos trabajos, clausurar la XXXII reunión de cronistas y la entrega de reconocimientos a los cronistas participantes.
Por último, a mediodía de ese domingo, los cronistas chiapanecos regresamos a nuestra tierra, llegando a la ciudad de Tuxtla Gutiérrez como a las 2 y media de la mañana.
Fue una larga trayectoria de más de 13 horas, pero valió la pena, por las atenciones recibidas de los martinenses, las amistades hechas y los nuevos conocimientos adquiridos.
*Cronista de Tonala, Chiapas