“La educación en una forma integral de cultura, la cultura se reafirma y se desarrolla, con la educación y ello abarca el arte, la ciencia, la filosofía, la historia, la literatura, etc., etc., en otras palabras, a todo aquello que es fruto de la construcción humana y que se llama cultura precisamente porque es lo opuesto a la naturaleza y que para desarrollarse no necesita de cultivo.”
Jaime Torres Bodet, escritor, funcionario público, pedagogo, periodista.
La guía y objetivo de La Voz del Norte, quedó planteado en el primer número de la nueva época, que se publicó aquel –ya lejano- fin de mayo de 2010. En el editorial señalamos: Nuestro compromiso es el mismo del 30 de junio de 1903,- inicio del andar que retomamos- es con la cultura, local, estatal, nacional, universal, entendiendo la CULTURA como el quehacer del hombre, de los pueblos, de las naciones que dignifica y enriquece la existencia. El semanario planteó a lectores, patrocinadores, colaboradores, directivos, la tarea: el cultivo de las diferentes formas que humanizan las circunstancias que nos rodean. En este cuarto año del periódico cultural – la edición ciento sesenta se encuentra en sus manos-, nos enorgullece saber que en las páginas del periódico se expresan voces de sur a norte y del Atlántico al Pacífico, diáfana muestra de la pluralidad geográfica y temática que distingue a la publicación originaria de la Atenas de Sinaloa, que como siempre, agradece la solidaridad de todos los que participan en ella, pero sobre todo a usted, lector que enriquece nuestra existencia.
Torres Bodet dejó un historial en la literatura, en la educación, en el servicio público. Su participación en el grupo Contemporáneos, donde figuran de manera relevante los sinaloenses Gilberto Owen, Enrique Gonzáles Rojo- hijo de Enrique González Martínezentre otros destacados hombre de letras y, su obra que está conformada por un catálogo que reúne: poesía, novela, ensayo, narrativa, lo colocan entre los escritores nacionales fundamentales. En su discurso: “Aspiraciones y metas de la educación mexicana” de 1943, dijo: La educación ha de concebir algo más decisivo y fecundo que una somera tarea de ilustración o una simple habilitación de emergencia para ciertos oficios y profesiones; era el discurso de toma de posesión del cargo de Secretario de Educación, donde añadió: Todo profesor que aconseja el bien pero acepta el mal y lo practica por comodidad o cobardía, no es un maestro. Ese fue Jaime Torres Bodet, un hombre de cultura que a La Voz del Norte impulsa a cumplir el compromiso.