Por Jaime Cháidez Bonilla*
La mano artística de Manuel Cruces Cuellar fue fecunda y variada, se encuentra en distintos lugares de Tijuana y en la memoria de miles de tijuanenses que vieron sus trabajos en televisión, en murales, en desfiles, en instalaciones en vivo. En las últimas 6 décadas Manuel Cruces estuvo ligado a Tijuana en múltiples formas.
La noche del jueves 27 de diciembre murió un personaje auténticamente tijuanense que decidió adoptar a la ciudad desde su niñez.
Cruces estudió de niño en la Antigua Escuela Álvaro Obregón, en la década de los 30, posteriormente estudió en la ciudad de México y Los Angeles, California, para regresar en los años 50 a una Tijuana próspera e instalar un estudio de arte en el pasaje Villa Colonial, en la avenida Revolución. Desde ese momento y hasta su muerte, Manuel Cruces participó en una cantidad impresionante de actividades de orden social, artístico e histórico.
Nacido en Mazatlán, Sinaloa, el 16 de marzo de 1930, Manuel Cruces llega a Tijuana desde niño y estudia en el edificio que actualmente es Casa de la Cultura de Tijuana. Su abuela y varios tíos ya vivían en la Calle Tercera, a media cuadra del Parque Teniente Guerrero. Desde aquellos momentos, el niño Cruces ya mostraba habilidades para dibujar.
Es en los años 40 que se muda a la ciudad de México, acompañando a su padre, empleado de telégrafos. Ahí estudia en una escuela llamada Iniciación Universitaria, donde aprende dibujo y pintura. Años después, estudia en la ciudad de Los Ángeles, California en la Polytechnic High School, donde continúa sus estudios de pintura y también fotografía.
A principios de los años 50 es cuando se instaló en el centro de Tijuana, ubicó su propio estudio para ofrecer sus servicios como decorador y pintor. Fue muy extensa la cantidad de obra, actividades y oficios que Manuel Cruces tuvo a lo largo de 6 décadas continuas.
En una entrevista que le realicé el pasado mes de julio, Manuel Cruces recordó con orgullo su paso por la televisora XETV canal 6 como escenógrafo, a partir de 1953. Se trató de la primera estación de televisión en Baja California. Cruces fue, primero, “Floor Manager” o Jefe de Estudio pasando luego a la dirección artística de innumerables programas.
El programa que más orgullo le provocó fue el que se tituló “Tijuana, Window to the South” conducido por la señora Jan Wood, una verdadera ventana promocional de la ciudad donde se presentaban artistas tijuanenses, documentales e información histórica de la ciudad. Este programa duró al aire 32 años, hasta que la señora Wood tuvo que retirarse por motivos médicos a principios de los años 80.
Una de las facetas que identificaron a Manuel Cruces fue la producción de murales que se pueden encontrar en distintos lugares de Tijuana. El artista ponía como ejemplo el mural realizado en 1979 en el interior del restaurante “Giuseppi´s” del boulevard Agua Caliente de Tijuana. Titulado como “Fantasía Veneciana”, el mural abarca cuatro paredes del lugar y representa un gran canal de Venecia, con la característica que de acuerdo a la iluminación el mural se transforma como si fuera de noche.
“Hay momento que las personas que están comiendo aplauden al ver ese cambio. Nunca me había tocado que aplaudieran por un mural que se transforma” expresó Cruces. A finales de los 90 Cruces realizó varios trabajos de decoración y pintura en los Estudios Fox de Rosarito, entre ellos un mural del trasatlántico “Titanic”.
Más de sus murales pueden ser encontrados en el interior de Palacio Municipal, el Centro Mutualista Zaragoza, la Funeraria González, el bar Río Rita y distintos restaurantes de la ciudad.
Hace 3 años, en 2009, Manuel Cruces compuso el tema “Canto a Tijuana”, un reconocimiento a su tierra adoptiva. La canción fue presentada por primera vez en el 120 aniversario de de la Fundación de Tijuana e interpretada por el tenor Marco Antonio Labastida en el Parque Teniente Guerrero.
*Periodista y editor cultural.