Por Jaime Cháidez Bonilla*
Tijuana es una ciudad de película, exótica, carismática, de una belleza bizarra que se antoja para filmarla.
Desde los tiempos del cine mudo hasta estos días la ciudad ha sido utilizada como referencia para hablar de los anhelos, la perdición, la esperanza, la migración, la violencia, el refugio.
Tijuana fílmica llena de imágenes de plata con miles, millones de historias en sus 123 años de vida.
Tijuana Hollywood.
DE CUANDO GREGORY PECK SE CASÓ EN TIJUANA
-“Conocí a Gregory Peck en la oficina de Migración – que atendía el señor Sánchez Aldana- ya era famoso por su seriedad en las películas. Alto y delgado, tostado por el sol, mantenía de la mano a una chiquilla preciosa que hablaba francés solamente. La intención del actor, y de la niña por supuesto, era contraer matrimonio. Pedían permiso e información al mismo tiempo. Sentí la punzada reporteril y perseguí a la pareja. Se casaron en la calle Tercera, casi en la esquina de la Revolución. Ninguna mujer mexicana hubiera creído la legalidad del matrimonio, pero ella, francesa, veía a un Gregory como si fuera Dios. Dos testigos, un taxista, y el otro bolero, de diez dólares cada uno, le dieron consistencia al documento, cuya copia más tarde vi, expedido en Emiliano Zapata, Morelos”.
Del Libro de Óscar Genel: Tijuana, ciudad de contrastes 2 (Ediciones ILCSA, 2001). *La periodista a la que se refiere Óscar Genel fue Veronique Passani. Se casaron el 31 de diciembre de 1955 y vivieron juntos hasta la muerte de Peck, a los 83 años, el 12 de junio de 2003.
TITANIC EN TIJUANA.
Es el año 1996 y Rosarito todavía es una delegación de Tijuana. Miles de bajacalifornianos participan como extras en una de las producciones más caras y taquilleras en la historia del cine. James Cameron, colérico, se pasa extenuantes jornadas desde el amanecer hasta altas horas de la noche perfeccionando cada uno de los detalles del filme que, finalmente, le proporcionó millones de dólares y bastantes premios. Esta imagen tomada por el legendario fotógrafo Douglas Kirkland, captura a Cameron en el famoso tanque de agua elaborado especialmente para el filme. Atentos, los actores Leonardo DiCaprio y Kate Winslet escuchan las indicaciones del director
EL PIOJITO.-
Se llamaba Cinelandia pero todos le conocíamos como El Piojito. Era un cine escondido en el Mercado Municipal de Tijuana, entre las calles Segunda y Constitución de la Zona Centro. Después del olor de las guayabas y las veladoras de la buena suerte, allá en el fondo, se encontraba el cine más barato de la ciudad. Con la compra de tu boleto podrías disfrutar de una triple función. En realidad, muchos de los que asistían eran desempleados en busca de un asiento para descansar, dormir, esperar, esconderse. Desde los años 60, esta sala fue una alternativa de bajo precio que tenía la desventaja del asalto de las pulgas. La broma era que a la entrada te entregaban un ladrillo para matar piojitos entre la oscuridad y las butacas. Cinelandia tuvo varias versiones, después de varios incendios. En la actualidad El Piojito es un edificio vacío con unos carteles antiguos pegados en una puerta de madera.
La imagen de ALFONSO LORENZANA es de los años 80.
*Periodista y editor cultural.
