La generosidad mexicana
El pueblo mexicano es generoso, esta es una de las características principales de su personalidad colectiva, los ejemplos son múltiples a lo largo de casi dos siglos de vida independiente: 1821-2012, periodo histórico donde de manera solidaria se ha participado ayudando a la población nacional e internacional en casos de desastre. Hoy la sequía que azota grandes porciones del país, obliga que la solidaridad se manifieste para aliviar las penurias que sufren los pobladores de territorios golpeados por la falta de agua, que lleva a una situación alimenticia precaria y casi desesperante. Es necesario que una vez más los mexicanos demos un paso al frente para ayudar a los hermanos mexicanos que sufren por la falta de alimento, situación que en el invierno es más preocupante pues afecta un gran segmento de México.
La generosidad mexicana –más allá de las políticas oficialistas- es la única posibilidad de hacer mínimas las circunstancias que sufren los agobiados por la sequía. Tenemos que hacer llegar insumos a los necesitados, de manera espontánea, utilizando todos los recursos con que se contamos en la sociedad civil, para que de forma expedita nuestros hermanos logren sortear esta calamidad climatológica que a todos afecta. Combatir el hambre es una responsabilidad humana, social y cultural, se es más solidario cuando se está consciente de que ayudando nos ayudamos. La Voz del Norte invita a los lectores a participar en la medida de sus posibilidades en esta cruzada humanística de ayuda a las víctimas de la sequía. Todos lo agradeceremos.