El municipio de Escuinapa se encuentra ubicado al sur del estado de Sinaloa. La palabra Escuinapa proviene del aztequismo itz-cui-na-pan, y está compuesto por los vocablos “itzcuintli” (perro), “atl” (agua), y “pan” (en), lo que significa, según historiadores como don Eustaquio Buelna y don Héctor R. Olea, “lugar de perros de agua” o “donde hay perros de agua.”
Los primeros pobladores de esta región del estado fueron descendientes de la raza azteca, quienes fundaron un poblado con el nombre de Ahuchén, aprovechando la sal de las marismas, la pesca y también la caza. Sin embargo, el constante ataque de piratas y los mosquitos que transmitían la fiebre los obligaron a trasladarse a otro lugar, más al sur del territorio, al cual dieron por nombre Pueblo Viejo. Al poco tiempo, encontraron un lugar que les daba mayor seguridad y se establecieron en el pueblo que llamaron Izquinapa. En el siglo XVI Nuño Beltrán de Guzmán pasó por esta región en su tránsito hacia el noroeste mexicano, tomando un descanso en un paraje al que llamaron El Charco de los Caimanes.
Al fundar la Villa de San Miguel de Navito, Beltrán de Guzmán dio la orden de poblar la localidad de Chametla, donde instalaron un gobierno militar al que denominaron Provincia de Chametla, pero ésta quedó abandonada como consecuencia de los continuos ataques de indígenas. Fue en 1565, cuando el capitán Francisco de Ibarra pacificó la región y fundó, en el mismo año, la Villa de San Sebastián (hoy Concordia), bajo cuya jurisdicción quedó Escuinapa.
Con la creación del Estado de Occidente, éste queda dividido en cinco departamentos de los cuales tres quedaron en territorio sinaloense: departamento de El Fuerte, departamento de Culiacán y el departamento de San Sebastián, al que continuaba perteneciendo Escuinapa. Con la separación de Sonora y Sinaloa, el estado se dividió en once distritos, perteneciendo Escuinapa al distrito de Rosario. En 1915 se suprimen las directorías políticas y se erigen los primeros once municipios libres, siendo Escuinapa uno de ellos.
La economía de Escuinapa se sustenta en la pesca de camarón, el cultivo de mango, chile, coco y tomate, y en menor escala en actividades comerciales y de servicios. Respaldado por 45 kilómetros de litoral rico en playas vírgenes, marismas, islas y esteros con una grandiosa biodiversidad, este destino ocupa un sitio privilegiado en el Pacífico mexicano.
La cabecera municipal nos brinda la tranquilidad de una ciudad que da muestras de su patrimonio cultural con edificios como el Templo de San Francisco de Asís, el Palacio Municipal y la Casa de la Cultura. El área llamada “Juan Gómez” recientemente fue declarada como reserva arqueológica, debido a los diversos vestigios arqueológicos encontrados en el lugar por personal del INAH.
Entre los atractivos turísticos más importantes de este municipio, se encuentra un pequeño y apacible pueblo de pescadores llamado Teacapán, el cual atesora playas vírgenes como La Tambora, Las Lupitas y Cuatro Surcos. La belleza de su entorno ecológico puede disfrutarse en los paseos en lancha que ofrecen los lugareños y en los que podrás visitar la Isla de Pájaros con miles de especies como fragatas, pelícanos, garzas, etcétera; la Isla Sumergible, que cuando la marea la descubre se llena de aves; así como interminables zonas de manglares. En Teacapán también es posible practicar la pesca de robalo, pargo, sierra, curvina y botete. Y en el calendario cinegético, se asienta que del 1 de noviembre al 15 de marzo se autoriza la caza de la paloma y el pato, sobresaliendo el canadiense; además, hay otras opciones como la caza del venado, jabalí, gato montés, tigrillo, onza y armadillo.
Antes de arribar a Teacapán se encuentra el Jardín Botánico, legado del periodista y escritor Antonio Haas, que cuenta con un formidable repertorio de plantas originarias de muchas partes del mundo, como bambúes, helechos, girasoles, araucarias, etc.
Otro recorrido que ofrecen los lancheros es hacia la Pirámide El Calón, enigmática construcción única en su género, pues es una auténtica pirámide compuesta por capas intercaladas de concha de ostión, pata de mula y almeja. Esta obra ancestral ha atraído la atención de arqueólogos a nivel mundial, tiene una altura de más de 20 metros y se presume que era utilizada como centro de adoración de las antiguas culturas que habitaron la zona. Entre las fiestas populares más importantes de Escuinapa, destacan la feria del mango, las de San Francisco de Asís, el día del Marino y la tradicional fiesta del Mar de las Cabras realizada cada mes de mayo entre cientos de palapas, música y competencias deportivas.
¡Visita Escuinapa, un lugar para vivirlo!
Fuente: Secretaría de Turismo del Gobierno del Estado de Sinaloa y el H. Ayuntamiento de Escuinapa.
*Maestra en Política Pública. ITESM